Paulina Schwarze ha sido jurado en las cinco ediciones que ha tenido este concurso literario. Ella, junto a Rossana Carrasco, han visto nacer y desarrollarse el certamen, el cual se encuentra mucho más consolidado, tanto en número de participantes como de países que ha ido abarcando. Paulina es profesora de Lenguaje, licenciada en Letras, mención Literatura de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Faltando muy pocos días para el cierre de esta edición del concurso, el próximo lunes 4 de noviembre, conversamos con Paulina sobre esta V convocatoria al Concurso (ver bases en https://www.portalsocialista.cl/cultura/concurso/v-concurso-de-textos-breves-beatriz-tati-allende-bussi/)
Estamos en la V versión del concurso de textos breves Beatriz Allende, ¿cómo evalúas la trayectoria que ha seguido este certamen? ¿Qué es lo que busca y hasta qué punto lo ha conseguido?
Ha sido hermoso ver cómo personas de distintas edades y orígenes se han sumado a esta convocatoria año a año, cada vez en mayor cantidad, pues comenzamos con solo 11 textos y el año antepasado, en la IV versión, contamos con más de 100 escritos participantes: eso habla claramente del alcance que ha conseguido y seguirá logrando. Por otro lado, si bien las temáticas han ido variando, todas tienen el objetivo de conservar la memoria de hechos históricos o más contemporáneos, siempre con el prisma muy personal de cada autora o autor que ha plasmado en palabras, ideas, recuerdos, propuestas, experiencias que ha querido comunicar. También ha sido maravilloso que, a partir de un tema propuesto, se abran tantos enfoques como participantes, cada uno con su estilo de escritura, con mucho corazón y con la misión de expresar a otros lo que tienen guardado.
El concurso cierra este 4 de noviembre, ¿cómo va la participación hasta ahora?
Hasta este momento hemos recibido 70 escritos, y lo habitual es que en los últimos días se incremente sustantivamente la cantidad de textos que llegan.
Este año la convocatoria tiene un llamado a imaginar sin trabas el futuro. Parece un poco utópico cuando se vienen malos presagios en el horizonte. En el mundo y en Chile el fascismo acecha…
La verdad es que todos sabemos que sin sueños no hay esperanza. Tenemos permitido soñar todo, lo posible y lo utópico. ¿Por qué no? Diría que, en otros tiempos no tan lejanos, lo que unió a Chile fue eso precisamente: soñar un Chile mejor, más justo, con humanidad; esos sueños son los que se fueron encarnando y alcanzando logros de progreso de esos valores en nuestro país. Todos y todas podemos empujar el Chile que soñamos.